2 de mayo: El crudo despertar de Madrid




Madrid, la ciudad que nunca duerme, se despertó el 2 de mayo de 1808 con el estruendo de los cañones y el clamor de una multitud embravecida. El pueblo, cansado de la tiranía francesa, se había levantado en armas contra el invasor, dando inicio a la Guerra de la Independencia Española.
El levantamiento, que pasó a la historia como "El Dos de Mayo", comenzó en la Puerta del Sol, donde una masa enfurecida se abalanzó sobre una patrulla de mamelucos, guardias personales del rey José I Bonaparte. El motín se extendió rápidamente por toda la ciudad, con el pueblo levantando barricadas y enfrentándose a las tropas francesas en las calles estrechas y empedradas.
Entre los héroes de aquel día se encontraban Agustina de Aragón, una joven de 22 años que luchó valientemente contra los franceses en la Puerta del Sol, y Velarde, un artillero que murió defendiendo el Parque de Artillería de Monteleón. Su sacrificio se convirtió en un símbolo de la resistencia heroica del pueblo madrileño.

La batalla fue encarnizada y sangrienta. Los franceses, con su superior armamento y disciplina, lograron sofocar el levantamiento tras varias horas de combate. El balance del día fue trágico: cientos de madrileños muertos o heridos, y la ciudad sumida en el caos y la desesperación.

Sin embargo, el 2 de mayo no fue solo un día de tragedia y derrota. Fue también el día en que Madrid demostró su valentía y su determinación de luchar por su libertad. El levantamiento inspiró a todo el país, dando inicio a una guerra de seis años que finalmente expulsó a los franceses de España.

El Dos de Mayo en el corazón de Madrid

El recuerdo del 2 de mayo sigue vivo en Madrid. Hay monumentos y placas que conmemoran los hechos de ese día en toda la ciudad, desde la Puerta del Sol hasta el Parque de Artillería. Cada año, el 2 de mayo se celebra una gran fiesta en Madrid, con desfiles militares, bailes tradicionales y otros eventos que rinden homenaje a los héroes del Dos de Mayo.

La historia del 2 de mayo es un recordatorio de que la libertad nunca es gratis. Es un día para celebrar la valentía y el sacrificio de nuestros antepasados, y para renovar nuestro compromiso con los valores que defienden: la independencia, la democracia y la justicia.

El Dos de Mayo es un día para recordar a los que lucharon y murieron por nuestra libertad. Es un día para celebrar nuestro patrimonio y para renovar nuestro compromiso de defender los valores que hacen grande a España.